"Apareció de repente, como una sombra que nadie esperaba. Su silueta la recortaba un horizonte incierto, mostrando claramente que no era un ser de este mundo..."
El Tercer Clavo
Durante miles de años permaneció oculto a los ojos de la humanidad. Ahora, por fin ese antiguo secreto ha visto la luz...
El último siempre pierde
No busques la soledad, ella te encontrará a ti...
Expediente 19/02
Ten cuidado con lo que sueñas...
Extracto de Fruta Amarga
Al final descubrí que ningún mortal puede prometer algo eterno porque tan sólo somos un alma etérea en el interior de un cuerpo caduco...
Fran J. Marber
El equipaje del escritor...
Fruta Amarga
Y al besarme me condenó a que nunca pudiera dormirme sin antes pensar en ella...
Gusanos de Seda
De algún modo, también nos comportamos como esos insignificantes gusanos de seda y llegado el momento trataremos de esconder nuestro miedos tras un espeso capullo de seda...
La Página 64
Busqué desesperado una estrella en el mismo corazón de París y no di con ella. Quizás, si hubiera podido asomarme desde lo alto como una de esas centenarias gárgolas de Notre Dame, la habría visto antes.
Página 168. El Juego de la Oca.
Se sinceró. Abrió el libro de su vida y me mostró cada una de sus páginas sin tapujos. Así hasta que se rompió y un par de lágrimas se escaparon por el balcón de sus ojos...